Guía turística de Milpa Alta

Para apuntalar a Milpa Alta, como un destino alternativo, dentro de la gama turística de la Ciudad de México, la Delegación presentó la guía turística de la demarcación, con fotografías, un mapa con simbología de los atractivos de los 12 pueblos y sus ferias, así como información de las rutas ecoturística, del nopal, del mole, zapatista, de la fe y la salud.

En conferencia de prensa, Pedro Rodríguez Arellano, director general de Desarrollo Rural y Económico Sustentable, en representación de Víctor Hugo Monterola Ríos, jefe delegacional, señaló que el objetivo es impulsar y apoyar la actividad turística, así como detonar la economía de la región, a través de la historia, cultura y tradiciones de las comunidades de origen prehispánico, además de la belleza de sus paisajes naturales, su riqueza gastronómica, sus artesanías, así como la calidez de su gente y su vocación de servicio.

Añadió que la Ciudad de México es por excelencia el destino turístico cultural más importante del país, con grandes contrastes, en los que destacan las zonas naturales y rurales, como la delegación Milpa Alta, donde los turistas podrán disfrutar de verdes bosques, tranquilidad, aire fresco, así como recorrer sus pueblos de origen prehispánico, en los que se preserva la lengua náhuatl, así como diferentes fiestas y ferias tradicionales, que permiten una convivencia con sus pobladores, además de una vasta y rica gastronomía.

Jorge Guerrero Carrasco, director de Atención Turística de la Secretaría de Turismo de la Ciudad de México, reconoció el trabajo de la Delegación para la elaboración de esta guía que promueve una de las fortalezas naturales del sur de la ciudad como es Milpa Alta, la cual tiene mucho que ofrecer a los visitantes, como paisajes naturales, tradiciones, gastronomía, historia, entre otros atractivos.

En representación de Miguel Torruco Valdés, titular de la Secretaría de Turismo capitalina, el funcionario destacó que desde el inicio de su administración, Miguel Ángel Mancera, jefe de gobierno de la Ciudad de México, impulsó el turismo como una de sus prioridades, por lo que acciones como ésta reflejan el seguimiento de este mandato.

Respecto a las rutas plasmadas en la guía, la ecoturística contempla la vista al Centro de Educación Ambiental Tepenáhuac, El Arrecife y La Gran Palapa, donde los visitantes podrán conocer y disfrutar en un ambiente seguro, las bellezas naturales de Milpa Alta mediante caminatas en senderos, practicando ciclismo, campismo, tirolesa, talleres ambientales, hospedaje en cabañas y temascales.

En la del nopal los visitantes disfrutarán un recorrido por los cultivos milpaltenses, sembrados en terrazas prehispánicas, donde los productores practican una agricultura orgánica y conocerán las parcelas de nopal certificadas.

Además recorrerán las instalaciones del Centro de Acopio de Nopal, mercado donde se comercializa esta cactácea. Asimismo, degustarán la rica gastronomía elaborada con nopal que se ofrece en el mercado de antojitos Benito Juárez, en el mirador de San Lorenzo Tlacoyucan o en restaurantes.

En la ruta del mole, los comensales podrán visitar el pueblo de San  Pedro Atocpan, La Capital del Mole, donde encontrarán una amplia variedad de recetas tradicionales que distingue a cada uno de los más de 28 restaurantes y más de 40 tiendas de venta de mole. Asimismo, conocerán algunas plantas procesadoras de mole de gran renombre nacional e internacional y disfrutarán de la belleza arquitectónica del pueblo, con sus calles empedradas e iglesias, algunas edificadas en el siglo XVI.

En relación a la ruta zapatista, Milpa Alta es una demarcación rural, sus 12 comunidades originarias se identificaron con el movimiento zapatista, prueba de ello fue que en San Pablo Oztotepec se ratificó el Plan de Ayala, síntesis ideológica del movimiento revolucionario. Para entender este movimiento, los visitantes deberán conocer San Pablo Oztotepec y sus sitios de interés, como la iglesia de San Pablo Apóstol del siglo XVII, Quinta Axayopan del siglo XIX, la Iglesia de Chalmita y el Museo Cuartel Zapatista construcción del siglo XIX, lugar donde se ratificó el Plan de Ayala.

La ruta de la fe ofrece más de 700 festividades anuales entre patronales, ferias tradicionales, peregrinaciones, Semana Santa, carnavales, Día de Muertos, entre  otras, considerando que la fe es el motor que mueve de manera natural el quehacer cotidiano de la población.

Finalmente, la ruta de la salud, permite a los turistas conocer las raíces culturales de la región, disfrutando de un temazcal tradicional, síntesis de conocimiento ancestral sobre la fisiología del organismo humano y del uso de las plantas medicinales, atendido por personal especializado, disfrutando de la relajación física y espiritual.